- Bugatti-El vídeo arranca con el Bugatti Chiron Pur Sport calentando antes de pasar a la acción. Transcurridos los primeros segundos, lo vemos alcanzar gran velocidad.
- Bugatti-La ‘C’ de Bugatti está presente en numerosos modelos desde los años veinte, pero en el caso del Chiron ha ido ganando tamaño hasta convertirse en una destacada característica que va desde el pilar
Un Bugatti derrapando es tan espectacular como caro, pero la ocasión lo merecía. El Bugatti Chiron Pur Sport no ha tenido problema alguno a la hora de ‘destrozar’ los Michelin Pilot Sport Cup 2R que fueron creados específicamente para él. ¿La razón? Protagonizar este vídeo, bautizado como ‘Drifting The C’ para celebrar que su producción ha alcanzado el ecuador: 30 de los 60 ejemplares que se fabricaran ya han sido entregados a sus propietarios.
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El vídeo arranca con el Bugatti Chiron Pur Sport calentando antes de pasar a la acción. Transcurridos los primeros segundos, lo vemos alcanzar gran velocidad antes de que el conductor (Sven Bohnhorst, el ingeniero que ha liderado el desarrollo y el chasis de Bugatti) gire las ruedas y acelere a fondo para llevar a cabo una impresionante maniobra de derrape.
Una maniobra que no es nada fácil: el humo de los cuatro neumáticos significa que hay muy poco agarre y eso requiere una combinación precisa entre la dirección y el acelerador para hacer algo que para la mayoría estaría fuera de su alcance y de su control. La ligera humedad que había sobre el asfalto, obviamente, también ayudó.
La ‘C’ de Bugatti
Tras las hipnóticas imágenes a cámara lenta, una toma aérea revela el resultado del derrape: los neumáticos del Bugatti Chiron Pur Sport dibujaron una ‘C’ en la pista. Obviamente, la trazada no fue casual: representa la línea en forma de ‘C’ que se puede reconocer en el perfil de los modelos de la marca francesa. Es, junto a la icónica parrilla con forma de herradura, uno de sus elementos de diseño característicos.
La ‘C’ de Bugatti está presente en numerosos modelos desde los años veinte, pero en el caso del Chiron ha ido ganando tamaño hasta convertirse en una destacada característica que va desde el pilar A hasta las grandes entradas laterales. No en vano, la moldura utilizada para dibujar esa línea lateral mide 2,8 metros de largo y está hecha, por cierto, con una aleación de aluminio única.
Preparado para los circuitos
La maniobra se llevó a cabo en una pista cerrada y libre de obstáculos. El objetivo era, también, realizar una prueba para mostrar la capacidad de su sistema de tracción total del Bugatti Chiron Pur Sport.
Cabe recordar que este modelo se presentó hace un par de años, en 2020, como la variante orientada a los circuitos. En sus entrañas lleva el famoso W16 de 8.0 litros con cuatro turbocompresores, que desarrolla 1.500 caballos de fuerza y tiene un par máximo de 1.600 Nm. La configuración del chasis y de la aerodinámica se ha ajustado para proporcionar una mejor conducción, más carga aerodinámica y mayor ligereza. Con estas prestaciones, es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 2,3 segundos, de 0 a 200 km/h en 5,9 segundos y de 0 a 300 km/h en 11,9 segundos. Su velocidad máxima es de 350 km/h.
Las líneas de producción de Molsheim terminarán, pronto, la producción de la gama del Bugatti Chiron: ya han fabricado 400 de sus 500 unidades. Mientras esperamos el próximo capítulo en la historia de la marca, siempre podremos disfrutar del Bugatti Chiron Pur Sport driftando… que es algo que no se ve frecuentemente.